Picasso era hijo de un pintor que le enseñó desde pequeño a dibujar y pintar. Como niño precoz ganó una gran confianza en si mismo. Esta seguridad, su fuerte salud y un carácter pasional, le impulsaban a trabajar incansablemente y fomentaban su capacidad creativa.
Obras de su juventud
París y el triunfo
Al trasladarse a París y conocer toda la vanguardia, las absorbió rápidamente y continuó el camino empezado.
Intelectualmente, Picasso era un Genio. Comprendió que el futuro del arte estaba en fusionarlo a conceptos abstractos – racionales como el espacio y el tiempo, los símbolos. Y Picasso era un gran cerebro lleno de conceptos racionales.
Pintura Cubista
Al ser Picasso un creativo – racional, su arte deriva hacia la ciencia, la experimentación y también los juegos con la pintura.
El método científico era la forma que eligió Picasso para comprender la realidad. Este método, como ocurre con anatomistas, aprende de la desfragmentación, separación y destrucción de las formas. Y una vez destruido había que reconstruirlo y entonces creaba la pintura. En esto se basa toda su creatividad, en reconstruir con su imaginación lo antes destrozado.
Sin embargo, creo que no se puede comprender plenamente algo que se ha destruido, pues su existencia ha sido eliminada.
Sí se puede, por el contrario (como hacían Chagall y Matisse) persistir en el conocimiento de aquello que sigue existiendo y con tiempo llegar a su esencia.
Consciente de este fracaso, Picasso rechazaba su propio racionalismo de científico, dejándose llevar por la espontaneidad y los cambios de idea. Esto impedía que apareciese en su obra justo lo que él buscaba: la expresión de la emoción y los sentimientos, que requieren una gran concentración para ser expresados con arte. Es muy difícil juntar en una obra dos polos opuestos: sentir y pensar.
Una incapacidad frente a un gran talento
Creo que Picasso no amaba. Predominaba en él una visión negativa. Tenía que expresar lo horrible, lo diabólico y lo muerto. Por ello, no le importaba destruir la realidad, no necesitaba modelos y cambiaba de obra continuamente. En sus obras cuesta encontrar la inocencia de un Matisse, o el profundo cariño vital de un Chagall. Todo lo bueno y bello de la vida que otros artistas si sabían expresar.
Pero si encontramos, por el contrario, en las obras de Picasso, la alegría del juego pictórico, la imaginación pura y los descubrimientos de la ciencia. Corazón roto pero genial.
Algunas de sus destruidas y reconstruidas mujeres
Muy interesantes la Confesión de Picasso
Y el documental EL Misterio de Picasso, donde se puede ver al artista en su proceso creativo.